La vacuna Covishield llegó al departamento de Boaco donde la población adulta y jóvenes con enfermedades crónicas recibieron la primera dosis para evitar ser contagiados con la Covid-19.
A primeras horas de la mañana, el centro de salud Ramón Guillén Navarro, empezó a recibir a los pacientes que esperaban con ansias ser vacunados para recibir la inmunización necesaria y de esta manera sentirse más tranquilos al estar en contacto con otras personas.
El doctor Carlos Cruz, director de servicios de salud, explicó que la vacunación voluntaria se está llevando a todo el territorio nacional.
Tras ser vacunado, el señor Aldo Campo, del barrio Olama, comentó sentirse feliz y aliviado a la vez.
"Esta es una vacuna muy importante y el gobierno nos está cuidando. Fue una sorpresa que viniera la vacuna tan pronto. Yo recibí una llamada del centro de salud para venir hoy y sabemos que aunque tengamos la vacuna siempre tenemos que protegernos".
María Yadira Castro Reyes, fue otra de los centenares de personas que acudieron a recibir su primera dosis.
"Yo me siento bien alegre y Dios me ha dado 70 años y quiero vivir un poco más. Tengo 5 enfermedades y esta es una oportunidad que nos manda Dios y por qué no decirlo, también el gobierno se ha preocupado por los más viejos".
Concepción Cano, de 90 años, llegó con su hija, Daisy Carolina Saravia Cano. Ambas se vacunaron.
"Venimos para prevenir esta terrible enfermedad. Le damos gracias al Presidente Daniel y a todo el equipo que son muy amables. La vacunación fue rápida a pesar de que hay bastante gente".
En otro punto del departamento de Boaco, específicamente en Santa Lucía, también se instaló un puesto de vacunación en el centro de salud.
Ahí llegaron adultos mayores y personas con enfermedades crónicas y oncológicas mayores de 18 años, que habitan en el centro de Santa Lucía y en las comunidades rurales.
"Me siento bien y sé que somos de la muerte, pero no quiero morir todavía por eso estoy aquí, estoy buscando esa protección para poder circular con más tranquilidad", dijo Elena Rivas Mendoza, de 73 años, quien habita en la comunidad El Llanito.
"Gracias a Dios que ya nos vino el inicio de esta vacuna porque nos da seguridad y una confianza grande para que la población camine tranquila. Quiero felicitar al gobierno porque está funcionando de acuerdo a una necesidad y si Dios lo permite estaré acá el 25 de junio aplicándome la segunda dosis", contó Rodolfo Rivas Mendoza, del sector seis, del casco urbano.