La planta de gas natural que avanza por encima del 80% de construcción en Puerto Sandino, Nicaragua, primera de su naturaleza en Centroamérica, prevé iniciar operaciones a finales del mes de octubre de 2021.
La información fue concedia por Winnie Irizarry, gerente del proyecto de New Fortress en Nicaragua, quien confirmó además durante un recorrido en el sitio este martes, que el plantel
producirá energía para el país y además distribuirá gas natural a nivel centroamericano.
Irizarry detalló que se trata de una inversión 700 millones de dólares y se prevé procesar un millón de galones de gas natural al día con lo que se pretende producir 300 MW interconectados a la red de Nicaragua y centroamericana.
Para tal efecto se cuenta con un almacén flotante de 40 millones de galones que serán transportados de manera constante a 170 contenedores para las operaciones de la planta.
Con la planta, Nicaragua se posiciona en el mercado regional y le añade confianza al sistema nacional.
Una de las mayores ventajas de la generación a base de gas natural es que se trata de energía limpia y barata.
“Es un referente para la región y al ser la primera empresa en la región de Centroamérica en distribuir y ofrecer la infraestructura de gas natural, una opción más amigable con el medioambiente y a un precio más competitivo”, detalló el gerente de operaciones.
Refirió que cuentan con la capacidad técnica necesaria para crear valor en la comunidad en la que operan.
Nicaragua, punto estratégico
En tal sentido refirió que la planta fue construida en Nicaragua pues se trata de un punto estratégico que facilita la distribución del gas natural licuado en la región.
“Estamos en una estancia privilegiada de los principales centros industriales de la región. En cuanto a la planta que estamos desarrollando aquí es una planta de 300 megavatios a base de gas natural, tenemos 7 turbinas instaladas de 44 megavatios cada una para un total de 308 megavatios. Con esta planta Nicaragua se posiciona en el mercado regional y nacional. Es la planta más grande de generación aquí en Nicaragua y esto le añade confianza al sistema nacional”, confirmó.
El nicaragüense Harvey Aburto, coordinador de ingeniería civil del proyecto, mencionó que se ha constituido en un conjunto de desafíos que han podido ser superados con éxito.
“Para alcanzarlo hemos tenido que trabajar como una naturaleza de proyecto abstracto, lo que nos ha permitido desarrollar diferentes estrategias para darle solución a este tipo de proyectos complejos”, señaló.
Recordó que la obra ha sido posible gracias a la mano de obra nicaragüense, lo que demuestra que en el país existe la capacidad para sacar adelante obras de esta naturaleza.
“La mayoría de los empleados de New Fortress Energy actualmente son nicaragüenses. También tenemos aquí contratistas de obras civiles que son mano de obra nicaragüense y obviamente este tipo de proyectos requiere del apoyo de diferentes empresas que vienen de otros países que nos han venido a apoyar y han venido a enriquecer la experiencia, es un orgullo para los nicaragüenses que estemos a la par, tecnológica y de conocimiento de los diferentes tipos de especialistas que han venido de otros países”, destacó.
New Fortress es una empresa pública que cotiza en la bolsa de valores y tiene operaciones en más de 10 países alrededor del mundo.