CSJ Y UNICEF CLAUSURAN DIPLOMADO SOBRE PROTOCOLO DE ACTUACIÓN EN DELITOS DE VIOLENCIA SEXUAL


* Impartido a 109 secretarios, jueces y juezas penales que conocen casos de violencia; con el apoyo técnico y financiero del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
La presidenta de la Corte Suprema de Justicia doctora Alba Luz Ramos Vanegas y el representante en Nicaragua del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) señor Antero Almeida de Pina, clausuraron este primero de octubre el diplomado “Protocolo Estandarizado de Actuación Judicial para procesos penales en delitos de violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes”.
“Este curso de formación les permitió reconocer la realidad de la niñez que enfrenta situaciones abusivas de poder, cuando es víctima de violencia sexual”, manifestó la presidenta de la CSJ Dra. Alba Luz Ramos Vanegas.
Mediante un video, la magistrada Ramos Vanegas saludó a los discentes felicitándolos por el aprovechamiento del curso y su compromiso para mejorar cada vez más el servicio de justicia que brindan: “este curso de formación les permitió reconocer la realidad de la niñez, que enfrenta situaciones abusivas de poder cuando es víctima de violencia sexual”.
En el diplomado los participantes conocieron las normativas nacionales e internacionales para la prevención, atención, investigación y resolución de las diversas formas de violencia sexual contra la niñez y la adolescencia, así como su aplicación en las acusaciones que conocen diariamente.
“Valoraron que en las relaciones que se promueven en la escuela, en la comunidad y en la familia, aún se practica el castigo físico y la violencia verbal, como forma de crianza para la niñez; “esperamos que esa situación se vaya erradicando en nuestro país”, exhortó la magistrada presidenta de la CSJ.
La doctora Ramos Vanegas expuso que la metodología y el análisis de género aplicada en el diplomado, facilitó que el estudiantado --desde su identidad personal-- reconozca las diversas situaciones de violencia que sufre la niñez y la adolescencia, “lo cual no sólo los sensibiliza, sino que además esperamos estimule en ustedes un mayor compromiso con la protección de la niñez”.
“Esta formación representa un paso importante para mejorar la atención brindada a las víctimas de violencia, con abordaje de una protección integral y sostenible”, expresó el señor Antero Almeida de Pina, representante de UNICEF.
Mayor compromiso
“Es muy importante que las directrices que contiene el protocolo de actuación para funcionarios judiciales en los procesos por delitos de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes, tomen vida durante las audiencias; tratando a las víctimas con la empatía, respeto, consideración, seguridad y dignidad que ellos requieren”, instó la doctora Ramos Vanegas.
Por su parte, el representante de UNICEF en Nicaragua señor Antero Almeida de Pina, por medio de un video dirigido a los graduandos, expresó que “esta formación representa un paso importante para mejorar la atención brindada a las víctimas de violencia, con abordaje de una protección integral y sostenible”.
Almeida de Pina reiteró el compromiso de UNICEF para continuar apoyando al desarrollo de las capacidades, la promoción de políticas y procedimientos que faciliten el acceso a la justicia y la protección en casos de violencia hacia la niñez y la adolescencia.
“Agradecemos la oportunidad de contribuir y felicitamos a las personas que tomaron este diplomado, quienes hoy reciben su certificado y les invitamos a aplicar los conocimientos adquiridos para facilitar el acceso a la justicia”, manifestó el señor Antero Almeida de Pina.
La presidenta de la CSJ finalizó agradeciendo la cooperación técnica y financiera de UNICEF, por continuar apoyando con los procesos de formación especializada para el personal jurisdiccional y administrativo del Poder Judicial.
“Mi saludo y felicitación a todas y todos, tengan en cuenta que todo conocimiento es una oportunidad para generar cambios. Es la educación la llave que permite el acceso y disfrute de otros derechos humanos”, concluyó la doctora Alba Luz Ramos Vanegas.
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