La Vice-Presidenta de la
República, Rosario Murillo, saludó a las
familias católicas que este miércoles participaron en la tradicional ceremonia
de imposición de la ceniza.
"Sabemos que estos son días para liberarnos de todas las miserias,
de todas las miserias. Miserias mentales, la miseria espiritual que es terrible
y caminar trabajando con confianza en Dios, buscando nuestros derechos, el
derecho a vivir tranquilos, seguros, con estabilidad, con trabajo y con esa
vida buena, vida digna que merecemos todos", valoró Rosario.
"Hoy miércoles de ceniza queremos saludar a todas las personas, las
familias que han acudido a los templos con las medidas que debemos guardar con
los cambios que la pandemia ha impuesto en la vida de las familias en todo el
mundo, acudido para recibir la ceniza sagrada, para volver, cuando recibimos la
ceniza decimos, bueno, estamos volviendo al Espíritu Santo, a Dios", indicó.
"Desde pequeños aprendimos que recibir la ceniza nos recuerda que
somos polvo y que al polvo volveremos. Polvo enamorado, ese polvo que Dios
llena de vida y nos recordamos también cuando recibimos la ceniza en la
fragilidad, está en el mundo hoy esa palabra sobre todos los mensajes que se
hacen alrededor de la vida, la fragilidad y la incertidumbre son la esencia de
esta vida, de este tiempo. Y bueno, la fragilidad, vivir persiguiendo el polvo
porque vivimos detrás de lo intrascendente muchas veces y buscando lo que tal
vez hoy cuenta o vale, pero mañana ya no está", reflexionó.